¿Comunicación? ¿Redes Sociales? ¿Mercadeo?

Existen diferentes áreas que permiten a una empresa dar a conocer su servicio o producto, pero todas éstas se trabajan en vano si no hay una estrategia de marca clara que defina hacia dónde ir, y más importante, el por qué.

Entendiendo lo anterior, una pequeña semilla comenzó a crecer en mí.

Estaba estudiando Diseño Gráfico, mundo que me apasiona pues precisamente consiste en aterrizar gráficamente un concepto, una idea a comunicar. Sin embargo, poco a poco empecé a darme cuenta del gran valor que existe cuando la idea detrás tiene un fundamento estratégico.

¿Hacia dónde ir? ¿Quién es la marca? ¿Cuál es su propósito?

Así comenzó mi pasión por la estrategia. Esta palabra puede ser ambigua, teniendo diferente significado dependiendo del contexto empresarial. Con estrategia yo me adentré a enfocarme en el por qué y para qué.

Independientemente si se trata de mercadeo, medios digitales, comunicación, al final la misma se trata de cumplir con un propósito y más importante, entender a la persona que estará interactuando con la marca.

Así decidí especializarme en medios digitales y luego en mercadeo, para terminar de comprender a mayor profundidad este por qué del que he venido escribiendo. Entendí que se trata de entender al ser humano que desea comunicarse con la marca. Que sea fácil para él o ella hacerlo, que sea ameno, que sea práctico en su día a día y más importante, que pueda vivir una experiencia.

Ese es el reto que busco vivir en mi día a día, lograr una verdadera conexión entre la marca y la persona que desea ser entendida.

Que nunca se nos olvide que es un ser humano quien está detrás, no un usuario más.

– Ana Paula Figueroa