Más allá de un logotipo
Creo que varios acá sabemos lo que implica el crear un logotipo, otros tenemos una idea y otros puede que creamos que es algo que se tiene que ver “bonito” y “cool”.
Un logotipo no es lo mismo que Branding.
Éste es el resultado de un proceso determinado para representar los valores, ADN, concepto y esencia de la marca.
Branding es un conglomerado de sentimientos y experiencias que una marca evoca a sus consumidores. Branding es reflejar un estilo de vida, es puramente emocional.
Siempre coloco el ejemplo del iceberg. El logotipo es la punta, y el branding es esa gran masa de hielo por debajo del mar, es ese sentimiento intangible que no podemos ver, pero que está presente y es lo que da un sentido a la comunicación. Es la base de todo.
El éxito de las grandes marcas como Nike, Starbucks, Airbnb ha sido éste. Las personas están dispuestas a gastar más en sus productos debido a que ellos crearon y solidificaron estratégicamente experiencias memorables que tocaron las emociones de las personas.
Branding es dejar de vender productos y servicios para ofrecer experiencias, emociones y un estilo de vida enfocado al bienestar del ser humano. Al final de todo, las personas no necesitan más productos y objetos, pero sí necesitan oportunidades para aprender y descubrir, necesitan maneras para expresarse a través de varias vías, necesitan herramientas e inspiración para su bienestar y hacer del mundo algo mejor.
El Branding consta de 4 aspectos.
Recordemos que una marca es como una persona, con intereses y una magnífica personalidad detrás de ella y éste será el motivo por el que su segmento la buscará:
1. ¿Cómo me siento?
Definir las emociones transmite la marca al relacionarse con ella
2. ¿Cómo me expreso?
Definir el tono de comunicación, si habla de usted, de tú, con mucha jovialidad o es más serio.
3. ¿Cómo me comporto?
Personalidad de la marca
4. ¿Cómo me miro?
Look & feel, línea gráfica y logotipo que evoquen los 3 primeros pilares.
Estudios comprueban que el 85% de las desiciones de compra son tomadas por el factor emocional, y el 15% restante es racional, o sea, una evaluación de las características y funcionalidad del producto o servicio.
Por esto, creo que es importante prestarle atención a todas las características del producto en cuanto a calidad, durabilidad, etc. Sin embargo, el verdadero valor de la marca reside en darle un espacio a las personas para soñar y enamorarse de nuestras marcas y esto lo lograremos por medio del Branding.
¡A ponerlo en práctica!
– Mafer Jünger